El término micronutrientes se usa para describir vitaminas y minerales en general. Tu cuerpo necesita cantidades más pequeñas de micronutrientes en relación con los macronutrientes.
Se deben obtener los micronutrientes de los alimentos ya que el cuerpo no puede producir vitaminas y minerales. También se les conoce como nutrientes esenciales.
Las vitaminas son compuestos orgánicos producidos por plantas y animales que pueden descomponerse por calor, ácido o aire. Los minerales son inorgánicos, existen en el suelo o en el agua y no se pueden descomponer.
Las vitaminas y los minerales son vitales para el crecimiento, la función inmune, el desarrollo del cerebro y muchas otras funciones importantes. Las vitaminas y los minerales se pueden dividir en cuatro categorías: vitaminas solubles en agua, vitaminas solubles en grasa, macrominerales y minerales traza. Independientemente del tipo, las vitaminas y los minerales se absorben de manera similar en tu cuerpo e interactúan en muchos procesos.
Vitaminas solubles en agua
La mayoría de las vitaminas se disuelven en agua y, por lo tanto, se conocen como solubles en agua. No se almacenan fácilmente en tu cuerpo y se excretan con la orina cuando se consumen en exceso. Si bien cada vitamina soluble en agua tiene un papel único, sus funciones están relacionadas.
Las vitaminas solubles en agua, con algunas de sus funciones, son:
Vitamina B1 (tiamina): ayuda a convertir los nutrientes en energía.
Vitamina B2 (riboflavina): necesaria para la producción de energía, la función celular y el metabolismo de las grasas.
Vitamina B3 (niacina): impulsa la producción de energía de los alimentos.
Vitamina B5 (ácido pantoténico): necesaria para la síntesis de ácidos grasos.
Vitamina B6 (piridoxina): ayuda a tu cuerpo a liberar el azúcar de los carbohidratos almacenados para generar energía y crear glóbulos rojos.
Vitamina B7 (biotina): juega un papel en el metabolismo de los ácidos grasos, aminoácidos y glucosa.
Vitamina B9 (folato): importante para la correcta división celular.
Vitamina B12 (cobalamina): necesaria para la formación de glóbulos rojos y para el funcionamiento del sistema nervioso y del cerebro.
Vitamina C (ácido ascórbico): necesaria para la creación de neurotransmisores y colágeno, la principal proteína de la piel.
Las vitaminas solubles en agua desempeñan un papel importante en la producción de energía, pero también tienen varias otras funciones. Debido a que estas vitaminas no se almacenan en tu cuerpo, es importante obtener suficientes de los alimentos.
Vitaminas solubles en grasa
Se absorben mejor cuando se consumen junto con una fuente de grasa. Después del consumo, las vitaminas solubles en grasa se almacenan en el hígado y los tejidos grasos para su uso futuro.
Los nombres y funciones de las vitaminas solubles en grasa son:
Vitamina A: necesaria para una correcta visión y función de los órganos.
Vitamina D: promueve la función inmune adecuada y ayuda en la absorción de calcio y el crecimiento óseo.
Vitamina E: asiste a la función inmune y actúa como un antioxidante que protege las células del daño.
Vitamina K: necesaria para la coagulación de la sangre y el desarrollo óseo adecuado.
Macrominerales
Los macrominerales son necesarios en cantidades mayores que los minerales traza para realizar sus funciones específicas en tu cuerpo.
Los macrominerales y algunas de sus funciones son:
Calcio: Necesario para la correcta estructura y función de los huesos y dientes. Ayuda en la función muscular y la contracción de los vasos sanguíneos.
Fósforo: parte de la estructura de la membrana ósea y celular.
Magnesio: ayuda con más de 300 reacciones enzimáticas, incluida la regulación de la presión arterial.
Sodio: electrolito que ayuda al equilibrio de líquidos y al mantenimiento de la presión arterial.
Cloruro: A menudo se encuentra en combinación con sodio. Ayuda a mantener el equilibrio de líquidos y se utiliza para hacer jugos digestivos.
Potasio: electrolito que mantiene el estado del líquido en las células y ayuda con la transmisión nerviosa y la función muscular.
Azufre: parte de cada tejido vivo y está contenido en los aminoácidos metionina y cisteína.
Minerales traza o microminerales
Los minerales traza son necesarios en cantidades más pequeñas que los macrominerales, pero aún así permiten funciones importantes en tu cuerpo.
Los minerales traza y algunas de sus funciones son:
Hierro: ayuda a proporcionar oxígeno a los músculos y ayuda en la creación de ciertas hormonas.
Manganeso: Ayuda en el metabolismo de los carbohidratos, aminoácidos y colesterol.
Cobre: Requerido para la formación de tejido conectivo, así como para la función normal del cerebro y del sistema nervioso.
Zinc: Necesario para el crecimiento normal, la función inmune y la cicatrización de heridas.
Yodo: Ayuda en la regulación de la tiroides.
Fluoruro: Necesario para el desarrollo de huesos y dientes.
Selenio: importante para la salud de la tiroides, la reproducción y la defensa contra el daño oxidativo.