AUTOEXAMEN DE SENO
El mejor momento para hacerse un autoexamen de las mamas es más o menos de 3 a 5 días después del comienzo del periodo. Las mamas no están tan sensibles o con protuberancias en ese tiempo en su ciclo menstrual.
Si usted ha llegado a la menopausia, realícese el examen el mismo día todos los meses.
Empiece por acostarse boca arriba. Es más fácil examinarse todo el tejido mamario si está acostada.
Coloque la mano derecha por detrás de la cabeza. Con los dedos del medio de la mano izquierda presione suave pero con firmeza haciendo movimientos pequeños para examinar toda la mama derecha.
Luego, estando sentada o de pie, palpe la axila, ya que el tejido mamario se extiende hasta esta zona.
Presione suavemente los pezones, verificando si hay secreción. Repita el proceso en la mama izquierda.
Utilice uno de los patrones que se muestran en el diagrama para constatar que esté cubriendo todo el tejido mamario.
Luego, párese frente a un espejo con los brazos a los lados.
Mire las mamas directamente y en el espejo. Busque cambios en la textura de la piel, como hoyuelos, arrugas, abolladuras o piel que luzca como cáscara de naranja.
Igualmente observe la forma y el contorno de cada mama.
Revise para ver si el pezón está hundido.
¿Qué estamos buscando?
-Un bulto del tamaño de un guisante o una avellana (no tiene que ser doloroso). Una masa dura y densa, inmóvil al palparlo.
-Anomalías asimétricas. Generalmente sólo aparecen en uno de los senos.
-Pezón retraído (en una posición invertida a la normal).
-Cambios en el color de la areola (la piel de tonalidad oscura que rodea al pezón).
-Alteraciones en la textura de la piel de la mama (piel de naranja, rojeces, grietas).
-Incremento del número de venas visibles en uno de los senos.
-Asimetrías en el tamaño de las mamas.
Recuerda visitar a tu medico ante cualquier anomalía.